Una mujer entra delgada al baño de un aeropuerto y sale «embarazada» para ocultar lo que robó

En los terminales aéreos se cumplen estrictas medidas para garantizar la seguridad de todos los ciudadanos minimizando cualquier riesgo y combatir los delitos.

En esta oportunidad, una mujer fue descubierta por las autoridades policiales después de que ocultó en su vientre la mercancía que robó pasando desapercibida en el aeropuerto de Taoyuan.

La mujer oriunda de Hong Kong entró a un baño del aeropuerto delgada, y salió con el vientre bastante abultado simulando un embarazo, pero lo que había en el interior de su barriga no era un bebé: eran los dos gatos persas que se había robado.

Las autoridades han emprendido una investigación sobre el caso para determinar cómo la mujer pudo pasar el control de seguridad sin que detectaran a los dos felinos.

Según un medio de comunicación local, la policía obtuvo las imágenes de las cámaras de seguridad del aeropuerto que mostraban a la mujer cargando una bolsa de color blanco y saliendo de un baño público fingiendo estar embarazada.

Su imagen era completamente distinta cuando entró al baño, fue en ese lugar donde guardó a los gatos entre su ropa.

Una criadora de gatos identificada como Chang Chin-yi, habría sido la víctima del robo, denunció que sus dos gatos persas llamados Anngi y Da Lili habían sido robados el pasado 5 de febrero.

“Fue durante la hora de comer, entré con platos de carne y vi que faltaban dos gatos”, relató la mujer desde su apartamento en Nueva Taipéi, donde alberga 40 gatos persas que vende aproximadamente en 3.300 dólares cada uno.

De inmediato sospechó de una mujer que presuntamente quería comprar a Anngi y había visitado su casa el mes anterior, ella se negó a cerrar la venta porque temía que la cliente ya tuviera demasiados gatos.

Relató que cuando le dijo la noticia reaccionó explosivamente mostrándose afligida. “Se volvió loca, estaba llorando y gritándome por teléfono cuando escuchó la noticia”, agregó.

En las imágenes grabadas por las cámaras de seguridad del exterior del apartamento de la criadora de gatos se veía a la mujer saliendo por una puerta lateral con un gato debajo de cada uno de sus brazos para introducirlos en una bolsa blanca.

Chang decidió contactar a la mujer a través de Facebook y esta confesó el robo.

El departamento de policía de Taipéi investiga el robo a pesar de que tienen limitaciones porque ni Hong Kong, ni Taiwán tienen acuerdo de extradición.

Ante este problema, la criadora de gatos planea viajar a Hong Kong en los próximos días para acudir a las instancias judiciales.

NTN

Los dos gatos persas que llegaron a Hong Kong según lo que establece la ley, deberán pasar cuatro meses en cuarentena o ser sacrificados por no tener documentación, deben tener un certificado que compruebe que están libres de rabia.

La víctima del robo espera que se haga justicia y pueda recuperar a sus dos felinos para continuar con su práctica de comercializarlos, algunos condenan su acción. Comparte este polémico caso.

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