Kerri Waterworth, una madre de 29 años, de Inglaterra, fue a acostar temprano a su pequeño hijo Ellis. Como debía hacer otras cosas en su habitación, activó el monitor para vigilarlo mientras dormía, sin imaginar lo que registraría la cámara minutos después.
De casualidad, estaba revisando la grabación cuando de pronto una extraña forma transparente apareció en el video haciendo un movimiento circular sobre Ellis.
Ella pensó que se trataba de una araña, por lo que corrió de inmediato para salvar a su pequeño del ataque del supuesto arácnido.
«Lo primero que pensé fue que se trataba de una telaraña o de una araña, así que corrí a la habitación de mi hijo porque odio las arañas. Pero cuando me acerqué a la cuna no encontré nada», dijo la madre.
«Froté las manos alrededor de las paredes y los costados que estaban a la vista de la cámara y alrededor de la cámara, pero no había absolutamente nada», agregó.
Esto intrigó más aún a la madre, así que no dudó en indagar con detenimiento en los vídeos registrados por el monitor del bebé.
Fue así cómo se percató que en realidad la sombra era lo más parecido a un brazo espectral que parecía acariciar la piernita, la barriguita e incluso la cabecita de su pequeño hijo. Algo que para cualquier madre puede parecer bastante perturbador.
El brazo parece acariciar unos segundos al pequeño antes de desaparecer por completo de la escena.
Fue entonces cuando Kerri atribuyó la insólita presencia del «fantasma» al espíritu de Elizabeth Peggy, bisabuela del bebé, ya que la mujer de 90 años se había mantenido muy cercana a su hijo antes de que partiera de este mundo en el año 2016.
«Creo en los fantasmas, pero siempre he sido escéptica con otros videos de fantasmas, así que verlo por mí misma realmente me ha hecho creer aún más», dijo la mujer.
Lo que Kerri descubrió en el monitor la dejó sin aliento:
“Fue como si estuviera acariciando a mi hijo y al tocarlo, él reaccionó, como cuando alguien te hace cosquillas y tú te mueves en respuesta a eso. No parecía molesto en absoluto».
Kerri estaba bastante sorprendida no sólo por el presunto hecho paranormal, sino porque Ellis padece de autismo severo, y debido a eso debe vivir una rutina bastante estricta. Cualquier mínimo cambio en su día y en su rutina del sueño, puede tener consecuencias terribles.
Así que cuando lo vio responder calmadamente a la caricia de la bisabuela fallecida, se quedó atónita. Además, dice que nunca Ellis duerme de corrido, y en esta ocasión, como nunca antes se despertó un par de horas después del extraño suceso.
«Estoy segura que fue ella, realmente lo amaba. Ellis tiene discapacidades y siempre se preocupó por él, así que para mí tiene sentido que haya venido a consolarlo», concluyó la asombrada mujer.
Aunque definitivamente, Kerri jamás tendrá la certeza de qué pudo ser esa sombra extraña, ella prefiere creer que así fue. Después de todo, eso es mucho mejor que una temible araña.
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