Reacciona al ver que su hijo de 3 años tomó su teléfono para hacer un gran pedido de McDonald’s

Para los amantes de la comida no hay nada más atractivo que las ofertas promocionales del restaurante que más le gusta. Ante ello, no solo los adultos sino los más pequeños de casa también quieren aprovechar de comer más por una menor cantidad de dinero.

Algo mucho más atractivo si se trata de comida rápida, después de todo, nada como unas ricas hamburguesas para calmar el hambre al final de una larga jornada.

El incidente ocurrió en Recife, Brasil.

Esto fue exactamente lo que hizo un pequeño niño de tan solo tres años de edad llamado Tom, el niño hambriento decidió tomar el teléfono de su madre y ordenar un gran pedido de McDonald’s.

Tom decidió actuar por su propia cuenta y pedir mucha comida a una de las franquicias cerca de su localidad.

El pequeño aprovechó las ofertas de McDonald’s.

Esto sucedió solo poco después que el niño y su mamá llegaran a casa después de salir de consulta médica.

Como debe ser lo habitual, la madre quería ducharse y seguir con todos los procedimientos de salud para más tarde poder lidiar con su pequeño hambriento. Pero Tom, tenía otros planes, tomó el teléfono de su madre y realizó un gran pedido.

El pedido costó alrededor de 74 dólares.

La madre del niño, Raissa Andrade, explicó que la conducta de su hijo puede ser el resultado de algo que ha estado observando los últimos meses.

Raissa comentó que debido a la pandemia han estado realizando muchos pedidos de comida rápida para llevar a casa, y que su hijo claramente estaba copiando su conducta. Solo que nunca imaginó que pudiera tomar el teléfono y pedir un gran banquete suficiente para una familia de seis. Al respecto comentó:

“Recibí una llamada de recepción diciendo que había una entrega”.

El enorme pedido incluía seis cajitas felices, ocho juguetes de oferta especial, 10 batidos, 8 botellas de agua y dos helados. Sin embargo, todo esto no fue suficiente para el pequeño Tom quien no estaba conforme con el pedido.

Después de revisar detalladamente cada bolsa, se quejó con su madre diciéndole que el juguete especial que había pedido, un minion amarillo, y un pastel de manzana, no habían sido entregados.

La madre recibió 10 bolsas en total solo de comida de McDonald’s.

Más allá del descontento, el niño disfrutó de su cajita feliz. Por supuesto que él solo no se comió toda esa enorme cantidad de alimento, afortunadamente, Raissa pudo compartirla con otros miembros de la familia que viven en el mismo edificio.

Más tarde la madre admitió que fue difícil molestarse con Tom, al salir del médico estaba muy deprimida por presentar un problema de salud así que la travesura de su hijo terminó por animarla.

Sin duda, los más pequeños son el mejor tratamiento para los días difíciles. Comparte esta historia en tus redes y cuéntanos cuál hubiera sido tu reacción.

Te recomendamos