Pierde el dedo y desarrolla cáncer de piel por su hábito de morderse las uñas

Courtney Whithorn, una estudiante de psicología de 20 años fue diagnosticada con cáncer de piel, una enfermedad que puede desarrollarse por causas hereditarias o adquiridas.

En su caso, el cáncer apareció por su hábito de morderse las uñas, con sus dientes generó un severo daño en el área de su dedo pulgar arrancando incluso piel.

La única opción que le ofrecieron los médicos para evitar complicaciones fue amputar el dedo.

La joven adquirió el hábito de morder sus uñas por culpa de las intimidaciones que sufría mientras estudiaba en el colegio, en el año 2014 se mordió tanto la uña del dedo pulgar que la desprendió por completo.

Tiempo después, su dedo comenzó a adquirir un color oscuro, su apariencia era tan extraña que afectó su estima y procuraba ocultarlo ante sus amigos y familiares porque sentía vergüenza.

Finalmente, ella acudió a una consulta médica en la que comprobaron el daño que se causó en el área, su lecho ungueal estaba tan deteriorado que le causó un raro cáncer de piel conocido como melanoma acung lentiginoso subungueal.

Tras el diagnóstico, tuvo que ser sometida a varios procedimientos quirúrgicos. Los médicos intentaron salvar el dedo, pero la semana pasada tuvieron que amputarlo porque sus esfuerzos no tuvieron resultado.

“Cuando descubrí que morderme la uña era la causa del cáncer, me sentí devastada. Cuando piensas en cuántos niños se muerden las uñas, es una locura. Solo desearía haber tenido tanta confianza en mí misma hace años, tal como ahora”, declaró Courtney en una entrevista.

A pesar de que el médico tratante de la joven aseguró que su cáncer fue causado por su hábito de morderse las uñas, el doctor Nis Sheth, vocero de la Fundación Británica de la Piel, declaró ante un medio de comunicación que considera que es muy poco probable que haya sido solamente por esa razón.

Actualmente, Courtney se recupera en Australia, asegura que se siente tranquila y que los médicos le harán un seguimiento durante los próximos cinco años para comprobar si sufre una recaída.

Resaltó que pudo salir adelante gracias al apoyo de su familia y su novio Tyson Donnelly, de quien se enamoró después de que la defendiera en el colegio, antes de comenzar su relación amorosa fortalecieron una bonita amistad.

La experiencia de la joven sirve para crear conciencia sobre este tipo de hábito para ayudar a otros a prevenir. No te vayas sin compartir esta información.

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