Korisa Miller, una mujer de Michigan, Estados Unidos, terminó en el peor apuro el pasado 27 de enero, cuando estaba de pesca junto a su amiga, Melissa Kozlowski, en el Lago St. Clair, en el Condado de Harrison.
No podía imaginar que un día entre amigas terminaría en un milagroso rescate y la humillante experiencia que vivió después.
En un movimiento desafortunado, Korisa perdió el equilibrio en el muelle, resbaló y cayó al lago congelado, entrando en pánico.
Melissa trató con todas sus fuerzas de socorrer a su amiga, pero sus esfuerzos resultaban inútiles. Korisa pasó más de 15 minutos luchando por salir, hasta que vieron a unos pescadores y les suplicaron ayuda para sacarla del agua helada.
Joe y Mark fueron los bondadosos hombres que acudieron de inmediato a socorrer a la joven
Como había caído al agua con abrigo de nieve y jersey, los hombres procedieron a quitárselos, porque en su afán de ayudarla la estaban hundiendo más con esa pesada ropa. La Oficina del Sheriff del Condado de Macomb recibió una alerta y se presentaron también en el muelle para auxiliar a la mujer.
Cuando se presentaron los oficiales, Joe y Mark sostenían a Korisa sobre el agua, pero su peso no ayudaba, la joven empezaba a perder fuerzas y estaba aterrorizada.
«Sólo pensé que iba a morir, estaba hundida en el hielo, el agua helada de 2 grados me llegaba a la quijada, luchaba por mantenerme en la superficie. Sólo le decía a mi amiga: no me dejes morir», relató Korisa.
«De la cintura para abajo estaba completamente entumecida. No podía sentir mis pies», agregó.
Entre los pescadores y los oficiales, en un gran esfuerzo la levantaron empujándola desde los muslos, logrando sacarla del agua y arrastrarla hasta el borde del muelle.
¡Por fin estaba a salvo!
La Oficina del Sheriff se mostró muy orgullosa por la labor de los oficiales, así que publicaron en línea el video del rescate, sin imaginar que se haría viral pero por las razones equivocadas…
Korisa también lo compartió en sus redes, inicialmente, para crear conciencia sobre los peligros de la pesca en el hielo y las precauciones que hay que tomar, además de dar gracias a los héroes que le salvaron la vida.
Pero en un giro cruel de los acontecimientos, la gente no fue capaz de ver más allá y comenzó a publicar comentarios hirientes, llamándola «gorda» y cuestionándola «por qué estaba con esa ropa tan inapropiada para pescar en hielo».
Korisa se sintió absolutamente avergonzada por las críticas, al punto de arrepentirse de haber autorizado a los oficiales que divulgaran el video, pero ya era tarde y ya estaba en boca de todos.
Después se armó de valor y respondió a las burlas:
«Me quitaron la chaqueta y el suéter porque me estaba asfixiando. Por eso estaba en una camiseta sin mangas, no fui allí en una camiseta sin mangas», explicó.
«Después de pasar por una experiencia tan traumática y casi morir, ¿esto es lo que la gente tiene que decir?», sentenció.
«Todos ustedes son pequeños bebés que necesitan lastimar a otros porque no pueden amarse a ustedes mismos. Rezo para que nadie tenga que pasar por esto. Me alegro de estar viva y compartir mi historia. Esto no me impedirá hacer lo que amo, ahora voy a pescar con cuerda y chaleco salvavidas», agregó.
«Creo que estas personas ya no tienen conciencia. La gente no tiene idea de que yo pesaba 180 kilos y ahora soy como soy», concluyó.
Muchas personas acudieron a las redes para apoyar a Korisa.
«¡No puedo creer que esto es lo que es nuestro mundo ahora! La mujer se cayó en agua helada y se salvó y todo lo que la gente tiene que comentar es su apariencia física. Vergüenza para todos ustedes. Gracias a los rescatistas y feliz de que ella esté bien», dijo una internauta.
«Bravo por los rescatistas, si ellos tenían opiniones negativas sobre Korisa, ¡al menos, se las guardaron e hicieron lo que había que hacer. Ellos salvaron una vida!», escribió otra persona.
Enviemos un mensaje de solidaridad a Korisa, la gente tiene que darse cuenta cuánto daño puede hacer un simple comentario, comparte esta noticia para crear conciencia y entre todos logremos un mundo de mayor sensibilidad y empatía.