La dramática historia de un recién nacido dejado a su suerte dentro de una caja de cartón

Apenas nació y se deshicieron de él. Otro caso de irresponsabilidad parental ha conmocionado a la opinión pública mexicana, al saberse la noticia del hallazgo de un pequeñito recién nacido quien fue dejado fríamente a su suerte por su madre, a las afueras de la escuela primaria Josué Azueta en Coyoacán, México, vistiendo tan solo un pañal.

Tal parece que la familiar del bebé decidió dejarlo en la esquina de las calles Rey Topiltzin y Aztecas de la colonia Ajusto al Sur de la alcaldía Coyoacán dentro de una caja de cartón con ropa, toallas húmedas y otros artículos de higiene.

Tras una alerta ciudadana, un grupo de policías auxiliares adscritos a la Unidad de Contacto del Secretario de Seguridad Ciudadana de la Ciudad de México, lograron dar con el menor, sin embargo, aún se desconoce el paradero de la madre.

“Es increíble ver cómo hay madres tan desalmadas, capaces de deshacerse de un pedazo de sí mismas. Esto no debe seguir ocurriendo, pero ocurre y es muy lamentable”, dijo una madre, sensibilizada con el caso.

De inmediato, el niño fue trasladado a un centro de salud donde fue evaluado por varios pediatras y especialistas quienes lo resguardaron y estabilizaron, ya que había permanecido un largo tiempo a la intemperie. Afortunadamente, los médicos verificaron que se encontraba con buena salud y fuera de peligro.

Es realmente triste y lamentable ver que, mientras muchas madres (admirablemente, por cierto) ejercen incluso el rol de padre y madre, dando lo mejor de sí para criar a sus hijos, otras, como en este caso, sencillamente optan por desecharlos y dejarlos solos a su suerte.

No sé si el detonante en este tipo de mujeres es la desesperación o el egoísmo, habría que ponerse en su contexto social y familiar para entenderlas mejor. Pero lo cierto es que en la mayoría de los casos las excusas no valen.

Hoy en día los hijos se dejan de lado sencillamente porque sus madres no los quieren, ya sea porque son inmaduras, porque estos son producto de un abuso, porque nunca quisieron ser madres o simplemente, y aunque parezca imposible, porque no son capaces de sentir amor, ni por sus hijos ni por nadie.

En este caso se me generan muchas preguntas, pero de cualquier forma me parece una situación durísima que de seguro dejará una huella psicológica imborrable en el niño. No seas tú un multiplicador de esta tragedia.

Hay que rescatar los valores de la sociedad y promover la importancia de ofrecerle a los niños el amor, la protección y el respeto que merecen, sobre todo mientras son tan vulnerables y dependientes. Comparte esta noticia.

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