Nada mejor y más digno que poder mostrar nuestro cuerpo tal y como es, sin filtros, sin ambages. En días recientes, la actriz Rachel McAdams no sintió temor alguno en mostrarse tal cual es, con arrugas, vello en las axilas…
Rachel McAdams ama mostrar su cuerpo al natural
Y es que, aún a día de hoy, en pleno siglo XXI, todavía existen personas quienes creen en los estándares de belleza que impone la sociedad, y cuestionan cualquier cosa que salga fuera de esos parámetros.
Tener estrías, celulitis, arrugas, marcas en la piel y hasta vello corporal, no es un pecado, y así lo demostró la aún bella y sensual Rachel Mc Adams en su controversial (para algunos) publicación.
“Como si fuese lo más horrendo del mundo y algo necesario de ocultar. Eso a mí me resbala”, dijo la estrella de la gran pantalla.
Gracias a este tipo de estereotipos y prejuicios aún existentes, hay revistas que alteran completamente la imagen de alguien con el fin de que se vea “perfecto” para otras personas, ocultando el cómo debería lucir en realidad.
Dicho sea de paso, lo mismo le ocurrió recientemente a Karol G, cuya apariencia fue editada de manera tal que la hicieron ver como otra persona. No tardó en hacer patente su molestia con la revista, y muchos famosos la apoyaron.
Incluso, al punto de querer cambiar esos paradigmas y exigir poder mostrarse reales, como lo hizo Rachel Adams, la reconocida protagonista de Diario de una pasión, posó para la revista Bustle, sin siquiera una mínima edición de sus fotos.
“Quería verse natural y real”, comentó Mark Seliger, editor de Bustle.
Sin importar el qué dirán, la diva de Hollywood apareció en el tabloide usando ropa interior de látex. No obstante, sus varios embarazos han dejado una huella natural en su humanidad.
“He tenido dos hijos. Este es mi cuerpo, y creo que es muy importante mostrarlo al mundo. Está bien lucir lo mejor posible, trabajar en ello y estar saludable, pero, eso se ve diferente para todos”, añadió Rachel McAdams.
Sin lugar a dudas, la ejecutante de varios films derrochó una catarata de autoconfianza, dándole una “torta en la cara” a quienes no toleran el paso de los años.
Por otro lado, la actriz no se ha declarado feminista, ni mucho menos. Simplemente adora su cuerpo y lo luce tal como la naturaleza se lo otorgó. Vaya nuestro saludo y felicitaciones para una mujer tan auténtica y segura de sí misma.
Cada uno de nosotros tiene una imagen propia, que es la que intentamos transmitir a los demás. Ese concepto suele ser, generalmente, muy bueno, nos hace sentir orgullosos de lo que somos.
Nos hace ver que, comparados con los demás, no somos tan malos. Esa alta autoestima es la que quisiéramos que los otros también tengan. Sin embargo, el problema surge cuando ese deseo de mostrar algo que no somos, nos supera.
Se vuelve parte de nuestra identidad y terminamos siendo una ficción, una falsedad, una hipocresía. Es entonces cuando, mantener esta máscara, se vuelve un trabajo arduo, frustrante, que nos aísla y nos esclaviza.
Porque, sabemos de sobra que ese “yo” que estamos mostrando no es el verdadero, es hora de quitarse la máscara con valentía. Como Rachel, muéstrate al mundo en todas tus facetas, ya sean corporales o intelectuales. Todos somos vulnerables, no aparentemos otra cosa.
Confesarnos de este modo, mostrarnos vulnerables y falibles, nos ayuda a ser más humildes. Es esa la gran paradoja: para ser fuertes tenemos que reconocernos débiles. Para vivir, debemos morir.