«La gente como tú no debería existir”– Un chófer de autobús discrimina a una joven discapacitada

En nuestra sociedad hay mucho por hacer para promover la tolerancia y la igualdad. Lamentablemente algunas personas no son capaces de reconocer que todos los eres humanos tenemos los mismos derechos sin importar la apariencia ni la condición.

Sin ningún tipo de compasión miran al que luce diferente sin pensar más allá, sin comprender la dura realidad que puede estar sufriendo. Juzgan sin contemplación, y subestiman las capacidades de aquellos que tienen una condición especial.

Sus palabras, sus gestos, su rechazo, puede causar daños irreparables en quien los recibe.

El conductor de un autobús recientemente denunciado por la Federación de Asociaciones de Personas con Discapacidad Física y Orgánica (FAMMA) por presuntamente insultar y agredir a una persona con movilidad reducida.

El Consorcio Regional de Transportes de Madrid, empresa concesionaria encargada de la ruta de autobuses interurbanos de Madrid, retiró del servicio al chófer de forma cautelar mientras se investiga lo ocurrido.

Catalina, una joven estudiante de psicología de 20 años, con movilidad reducida y que se traslada usando su scooter eléctrico, viaja diariamente sin complicaciones usando los autobuses interurbanos de la capital española.

Pero hace una semana sufrió una experiencia muy desagradable. Según sus declaraciones, el conductor le dijo: “gente como ustedes no debería existir, son retrasados mentales, tu madre no debería haberte tenido”, y de acuerdo a su testimonio la escupió delante de los pasajeros.

El hecho sucedió el pasado 06 de febrero en un autobús de la línea 334 entre Conde de Casal y Rivas, el conductor no atendió su solicitud de ayuda para subirse al autobús.

“Estuve seis minutos esperando a ver si venía, no apareció, y le pedí al pasajero más fuerte que me ayudara”, relató la joven a un medio de comunicación local.

Cuando Catalina tenía que bajarse el chófer expresó en alta voz que él no podía retrasarse porque personas como ella se subían al autobús.

Sus padres son unos irresponsables, las personas como tú son unos niñatos, mira cómo lloras”, también la escupió.

De acuerdo con la federación que protege a las personas con discapacidad, el chófer la obligó a bajarse del autobús tres paradas antes de la que le correspondía alegando que la que ella había solicitado no era viable.

Siempre hay muchos coches aparcados en el lugar adaptado para bajar la rampa”, dijo el chófer.

Así que la joven tuvo que descender del autobús con su scooter con la ansiedad de verse afectada por sus problemas de orientación y un cambio en su rutina, pero gracias a la ayuda de otros pasajeros pudo resolver la situación.

La institución recopiló las declaraciones de varios testigos, algunos dijeron que desde que Catalina subió al autobús el conductor comenzó a quejarse. Ni siquiera esperó que se colocase con seguridad con su scooter poniendo su integridad en peligro.

Le exigen a la empresa concesionaria que tome las medidas correctivas contra el conductor y el Consorcio Regional de Transportes de Madrid, aseguran que en las condiciones para la prestación de servicios “se asegure de la adecuada aplicación de controles psicológicos a los conductores”.

Alegan que cualquier conductor debe tener consciencia de la importante labor que hace para facilitar la autonomía de las personas con movilidad reducida.

El Consorcio investiga el hecho, comprobarán la existencia del expediente de reclamación y después abrirán otro para imponerle la sanción que corresponda.

La FAMMA informó que ha denunciado al Consorcio Regional de Transportes por la presunta comisión de un delito de odio contra la joven, de acuerdo con el artículo 510 del Código Penal, el conductor podría enfrentarse a penas entre seis meses y dos años de cárcel.

La noticia ha dado mucho de qué hablar en las redes causando indignación entre quienes rechazan la conducta del chófer. Compártela.

Etiquetas:

Te recomendamos