La dramática realidad de la mujer que fabricó una pantalla para protegerse del COVID-19

La pandemia de COVID-19, tiene a millones de personas confinadas en su hogar con el fin de evitar propagar más el letal virus, pero desafortunadamente, gran parte de la población no puede hacerlo por falta de recursos.

Muchas personas se ven en la necesidad de salir diariamente a las calles, pues necesitan seguir trabajando para subsistir ante esta brutal situación.

No todos pueden quedarse en casa

Desafortunadamente, no todos cuentan con los recursos para poder comprar un buen equipo de protección personal para el virus, dado que muchos de estos productos han subido exageradamente su valor, o es tanta la demanda que se han ido agotando.

Por eso, las personas tienen que ingeniárselas con lo que hay en sus casas para protegerse y evitar ser contagiados.

María Angelica Galindo Dolores es una de las tantas mexicanas que tienen que salir de su hogar porque su sustento depende de su trabajo diario, ya que como muchas otras personas vive al día, ella es usuaria del metro de la Ciudad de México, por lo cual está más expuesta a contraer la enfermedad.

Hace unos días el gobierno de la Ciudad de México dio a conocer un listado en el que 89 zonas son consideradas de alto riesgo de contagio, por lo que 51 estaciones del Metro del centro de México se encuentran en foco rojo, es decir, concentran la propagación del virus.

María diariamente tiene que hacer uso de este medio de transporte para llegar a tiempo a su trabajo, pues va de la Ciudad de México a Naucalpan, Estado de México.

Ante esta situación, tuvo que ingeniárselas y, para ello, simplemente necesitó la mitad de un garrafón de agua para poder crear su propia careta protectora. Ha sido una increíble idea, pues además de protegerse está dando una nueva utilidad a un objeto que muchas veces es desechado.

La mujer lleva dos semanas portando este plástico en su cabeza, además de usar una mascarilla debajo, ya que para usar dicho transporte colectivo ha sido obligatorio tener mascarilla para trasladarse en sus instalaciones.

“Hay que cuidarse, porque no puedo quedarme en casa y mi camino es largo”, dijo María Angélica.

Los internautas aplauden el ingenio de esta mujer, e incluso han pensado en implementarlo, ya que se les ha hecho económico y fácil de usar.

“Qué invento, a falta de dinero y necesidad de salir a trabajar. Ella sí se cuida y cuida a su familia, primero su salud. Bien por ella. Bendiciones”, escribió una internauta.

Muy bien por esta mujer que lucha por salir adelante y utiliza los recursos que están a su alcance para poder sobrevivir; ella merece todo nuestro respeto, al igual que mucha gente que pasa por una situación similar.

Implementemos las medidas necesarias para evitar ser contagiados, no salgamos de casa a menos que sea necesario y apoyemos a los más necesitados en la pandemia.

Comparte esta emotiva historia con todos tus amigos y nunca pierdas la fe de que algo bueno nos aguarda detrás de todo el caos que vivimos actualmente.

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