Graba a la enfermera a cargo de su padre enfermo en un hospicio para exponer su trato

El bienestar de las personas mayores siempre será una preocupación para los hijos. En ocasiones, su salud se vuelve tan frágil que la familia decide enviarlos a un centro de cuidados paliativos para que sus últimos momentos sean lo más reconfortantes posibles.

Pero aun así, nada garantiza que sean tratados como en casa. Es por eso que cuando Robert Olson, de 85 años, fue ingresado el Hospicio Bronson en Kalamazoo, Michigan, su hija, Roberta Lytle, con frecuencia lo visitaba para ver cómo lo atendían. Hasta que un día vio cómo una enfermera lo estaba tratando y supo que tenía que grabarlo todo.

Se trataba de la enfermera Brenda Buurstra, quien fue la encargada de comenzar a cuidar de Robert.

Un día, cuando Roberta se presentó sorpresivamente en el hospicio, inmediatamente se dio cuenta de que su padre no estaba recibiendo el mismo trato que los demás enfermos. Y no dudó en informar al personal del centro del tratamiento «no convencional» que estaba recibiendo su padre.

Fue entonces cuando decidió grabar en secreto a Brenda con las «manos en la masa», aplicando a Robert el tratamiento poco ortodoxo.

Lo que había sucedido era que Robert le había contado a su enfermera que su canción favorita es: «You Light up My Life» (Tú iluminas mi vida).Y a Brenda no se le ocurrió otra cosa que regresar al día siguiente con las letras de la canción, habiéndosela aprendido de memoria sólo para cantársela a él.

Roberta estaba con los ojos a cuadros, porque en realidad esperaba encontrarse otra cosa. Y lo que sucedía allá dentro era el acto de bondad más puro, por lo que no pudo dejar de grabar.

Pero lo que más le sobrecogía era ver cómo su padre, que apenas podía hablar, en ese momento sacó fuerzas no se sabe de dónde, y se unió alegremente para cantar con Brenda.

“Incluso a través de su pequeña máscara de ventilación que llevaba puesta, sus ojos se iluminaron. Todo su rostro cambió, y tenía una gran sonrisa ”, dijo Roberta entre lágrimas.

Pero el verdadero milagro sucedió después…


«Se podría decir que la canción lo encendió. Literalmente la canción lo iluminó. Se podría decir que tocó su corazón», dijo Roberta.

Y es que si bien Brenda ha sido una enfermera que durante más de 14 años se ha dedicado con alma y corazón a sus pacientes, definitivamente la conexión que tuvo con Robert fue única y lo que hizo por él fue algo que no es habitual ver.

A los pocos días de los conciertos privados de la enfermera, la salud de Olson comenzó a mejorar. Y Roberta no pudo contener su emoción.

Aunque el pronóstico inicial de los médicos era que Robert acabara sus días en el hospicio, en una semana fue dado de alta. Y todo gracias a la delicada ternura de una enfermera.

Y aunque ha tenido sus recaídas y su salud es muy frágil, al tener un problema cardíaco crónico, ya que le habían dicho que no le podían poner un marcapasos y sus días estaban contados, aseguran que el tratamiento especial de la enfermera realmente fue la clave para su mejoría.

Pero tras hacerse público este caso, cuando los medios entrevistaron a Brenda, todos se quedaron sin palabras. En realidad, ella venía haciendo lo mismo con todos sus pacientes desde hace años, sólo que no se lo había contado a nadie. 

«He cantado a pacientes durante 14 años, sólo que esta es la primera vez que me atrapan … Lo hago para que esa horrible estancia en el hospital simplemente sea un poco más brillante», dijo Brenda. «En algunos casos incluso ayuda a su total recuperación, como pasó con Robert».

«Esto es lo que hacemos todos los días», concluyó Brenda.

Youtube

Aquí puedes ver un reportaje completo de esta hermosa historia que vale la pena difundir:

No te vayas sin compartir esta historia para que el mundo conozca el grandioso trabajo abnegado y silencioso que hay detrás de muchas enfermeras.

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