Formar parte de una sociedad de veganos va más allá de no consumir alimentos de origen animal, es parte de un estilo de vida y cultura que se adopta a través de los años, algo muy serio para quienes la practican y la siguen con mucho respeto.
Laura Goodman, chef, copropietaria y jefa de cocina de Carlini en Shifnal, Shropshire, nunca pensó que el hecho de hacer una broma en las redes sociales le traería tantas críticas, hasta el grado de sentirse preocupada por su vida.
Esta chef escribió mensajes en un grupo de Facebook relacionados sobre el atrevimiento de aderezar una comida destinada para un vegano con productos de origen animal.
Pobre vegana, por la que pasé todo el día cocinando, se ha ido a la cama creyendo que aún es vegana.»
Ante este comentario los usuarios le preguntaron si realmente ella quiso decir que le había puesto productos de origen animal en la comida de alguien que había solicitado que no lo hiciera.
Su respuesta no fue para nada aclaratoria y la incertidumbre creció aún más. La cultura vegana representa un número importante en la sociedad de personas que llevan este estilo de vida y por este comentario en las redes sociales se sintieron engañados.
Más allá de que presuntamente haya sido un comentario hecho a manera de “broma” causó un malestar muy grande a los clientes del Restaurante de Laura, quienes se sintieron afectados por el solo hecho de no saber si consumieron en algún momento algún producto de origen animal o no.
La Agencia de Normas Alimentarias condenó y criticó fuertemente a esta chef. Su restaurante recibió múltiples acusaciones por parte todo tipo de consumidores, veganos y no veganos.
Las reacciones sobre el pésimo comentario publicado no fueron más que expresiones de una total indignación por la falta de respeto con sus clientes. Según declaraciones de Laura, ha recibido amenazas que atentan contra su vida.
Nos preocupa mucho lo que pueda sucedernos a todos y la forma en que puedan reaccionar estas personas veganas con respecto a nuestras propiedades y nuestras vidas”.
Muchas personas se indignaron por la admisión inicial de Laura y cuestionaron las implicaciones no solo éticas sino de salud que conlleva poner productos de origen animal en una comida para un cliente que ordenó un plato de productos lácteos y sin carne.
Diferentes ONG solicitaron a las autoridades locales que se realicen investigaciones para conocer si realmente Laura está respetando los principios de los clientes que llevan un estilo de vida vegano y confirmar que no están siendo engañados por los dueños de estos restaurantes.
Esto se ha salido de control. En la comida no había absolutamente nada de carne. Hemos recibido amenazas de muerte. Fue una mala elección haber escrito ese comentario”.
La página de Facebook fue eliminada después de recibir innumerables comentarios y quejas.
Marketing, burla, cansancio o simplemente un mensaje bajo efectos del alcohol fue un comentario que despertó la desconfianza sobre el respeto que debe prevalecer en la cocina de un restaurante para cumplir con los pedidos de los clientes.
Un restaurante es elegido según las costumbres o sencillamente por salud, es importante tener confianza en lo que vamos a consumir y que en ningún momento esto pueda representar un riesgo a nuestra salud, o meramente que vaya en contra de nuestra religión o estilo de vida.
Metro
Los dueños de restaurantes deben ser responsables a la hora de hacer publicaciones sobre la preparación de sus platos y preocuparse por mantener la confianza desde el primer momento en que un cliente entra por la puerta.
Todo restaurante debe ofrecer en cada servicio confianza, tranquilidad, bienestar y garantizar un verdadero “Buen apetito”. Comparte esta noticia con tus amigos.