Demanda a un centro de salud por no advertirle que su bebé nacería con síndrome de Down

La etapa del embarazo es una de las más bellas en la vida de cualquier mujer, desde el momento en que se entera de que en su vientre está formándose una criatura, un sinfín de emociones embarga a la futura madre.

Así fue para Edyta Mordel, hasta que se enfrentó a una dura realidad justo el día del nacimiento de su bebé.

Edyta una joven de 33 años de origen polaco y quien vive en la ciudad de Reading en Inglaterra, está demandando al Servicio Nacional de Salud del Reino Unido por 200.000 dólares.

El bebé nació en 2015

La mujer acusa al Hospital Royal Berkshire de que los médicos, supuestamente, no realizaron el examen para detectar el síndrome de Down en su bebé antes de nacer. Según ella, siempre se le dijo que todo estaba bien, pensó que le habían realizado la prueba y se confió.

Hospital Royal Berkshire

“Me aseguraron tantas veces que todo estaba bien, que el embarazo estaba bien, me engañaron”, dijo la molesta madre.

Fue así como Aleksander, el hijo de Edyta y su esposo Lukasz Cieciura llegó al mundo como un angelito distinto a lo que esperaban, y su caso ha sido tipificado legalmente como “nacimiento ilegal”.

Clodagh Bradley, el abogado de los Cieciura está convencido de que, si le hubiesen hecho las pruebas de rigor a la madre, e informado que el niño tenía altas probabilidades de nacer con esa condición, sin dudarlo Edyta habría tomado la decisión de no continuar con la gestación.

Sin embargo, Michael de Navarro, el abogado del sistema de salud dijo que Edyta se había negado a realizarse el examen al saber que el procedimiento implicaba un riesgo para la vida del bebé, y el Hospital no insistió en plantearlo de nuevo porque podría haberlo tomado como acoso.

En las notas médicas realizadas por el ecógrafo de la madre, está marcada la opción “Examen de Down declinado”

“Su informe de gestación indicaba que el análisis que Down había sido rechazado, por lo que se había dado cuenta de que nunca había tenido el resultado de la prueba», informó el abogado del Hospital.

Mordel se defendió negando todo lo expuesto por el abogado De Navarro, insistía en que ella sabía la importancia que tenía ese examen porque investigó mucho sobre eso.

«Hablé con la obstetra sobre la evaluación del Síndrome de Down, me había informado. Vi muchos videos y leí sobre la prueba, sabía desde el principio que estaría de acuerdo con la evaluación del síndrome de Down y que no tomaría ninguna otra decisión», afirmó la madre.

El proceso legal continúa. El pequeño Aleksander tiene cuatro años, es un niño risueño que gracias a que no se le hizo la prueba, pudo ver la vida.

Pese a todo, el niño es muy feliz

A mi parecer, es una pena que en estos tiempos se considere que los niños con síndrome de Down no tienen los mismos derechos. Todos los niños son especiales y merecen crecer en un hogar amoroso.

Comparte este insólito caso con todos tus amigos, y dinos cuál es tu opinión de el polémico comportamiento de esta madre.

Te recomendamos