Convierte su pequeña casa de tablas en una escuela para cumplir su sueño de ser piloto

Todos hemos tenido que cambiar hábitos y costumbres en medio de esta crisis sanitaria, económica y social.

Lisandro Hernández es uno de los tantos niños que se ha visto afectado por la nueva “normalidad” que trajo la pandemia del COVID-19.

Este pequeño estudiante no cuenta con los recursos digitales para llevar al día las actividades escolares.

Lisandro viene de una familia de muy pocos recursos económicos, pero eso no ha limitado su disciplina para alcanzar sus sueños.

Él recibe algunas de sus clases a través de la pantalla de su viejo televisor cuando uno de los canales regionales transmite un programa de estudio para reforzar el aprendizaje escolar de aquellos alumnos que no tienen acceso a las clases digitales.

“Si estoy aprendiendo, no mucho pero sí estoy aprendiendo”, dice Lisandro.

Muchos padres se vieron obligados a destinar parte del dinero que tenían para comprar algunos aparatos tecnológicos para que los niños pudieran adaptarse a la nueva modalidad de las clases a distancia. Pero otros, no cuentan con el presupuesto para adquirir un dispositivo, y tampoco para pagar la conexión a Internet, así que miles de niños se han visto forzados a abandonar la escolaridad.  

Este niño convirtió su pequeña casa de tabla en aula virtual

Este niño convirtió su pequeña casa de tabla, ubicada en zona rural de Puerto Colombia, en aula virtual para cumplir su sueño: ser piloto de aviación y regalarle una casa a la mamá – https://bit.ly/30U1Z01

Publicada por Noticias Caracol en Miércoles, 5 de agosto de 2020

Las autoridades competentes de algunas ciudades tomaron las medidas de poner a disposición ciertos recursos para los más necesitados, pero la ayuda no ha tenido gran alcance y siguen quedando por fuera muchos niños en edad escolar.

En el caso de Lisandro, él ha convertido su humilde casa en un aula virtual para asistir a sus clases con los programas municipales destinados a reforzar el conocimiento de los niños.

Cuando se trata de algunas clases puntuales, Lisandro se conecta con un ordenador portátil que le fue asignado por un programa que activó el gobernador de la cuidad. Sin embargo, no siempre cuenta con la conexión a Internet.

En medio de esta crisis sanitaria que ha provocado tantos cambios a los que la sociedad debe adaptarse, los más pequeños de la casa no han perdido las ganas y las esperanzas de salir adelante.

Lisandro nunca ha dejado de soñar y comparte su deseo de ser piloto.

“Esa será la primera vez que me suba a un avión”, revela Lisandro.

Este pequeño quiere estudiar y ser un gran piloto para darle una buena vida a su familia. Lisandro convirtió su pequeña casa de tablas, ubicada en zona rural de Puerto Colombia, en su aula virtual para cumplir su sueño de ser piloto de aviación y regalarle una casa a su mamá.

Tenemos la convicción de que Lisandro verá al mundo desde lo más alto controlando al mando de un avión y logrará todos los sueños que alberga en su corazón.

La disciplina de este niño es admirable, nos invita a reflexionar sobre la dura realidad que sufren en muchos hogares. En estos tiempos en los que la pandemia ha cambiado el estilo de vida de todos necesitamos ser más solidarios. Comparte la historia de Lisandro.

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