A sus 4 años se convierte en la persona más joven en escalar los 46 picos de Estados Unidos

Los niños nos sorprenden todo el tiempo, bien sea que salgan con preguntas inimaginables, que hagan algo super divertido o que nos dejen petrificados con su inteligencia lo cierto es que nunca dejan de maravillarnos.

Maebh Nesbitt, una pequeñita que está por cumplir apenas sus primeros 5 años, no es nada diferente. Resulta que ya en esta cortita vida que lleva ha logrado escalar los 46 picos del macizo montañoso de Adirondack en Nueva York, Estados Unidos.

Por esta increíble hazaña Maebh ha roto un récord pues es la persona más joven en escalar las montañas de Adirondack: su mamá es la presidenta del club 46ers, un club para quienes logran escalar los 46 picos.

Quienes forman parte de este club (entre ellos la madre y el padre de Maebh) reciben una pegatina que pueden exhibir orgullosos.

Maebh quería ser parte del club. Entonces su madre le explicó que para formar parte del Club 46ers debía escalar los 46 picos y la niña no dudó en cumplir con la tarea.

La verdad es que Siobhan Carney-Nesbitt, la madre de Maebh, pasea y escala montañas con la niña todo el tiempo. Y con esta práctica cotidiana fue permitiéndole a Maebh estar en condiciones para lograr escalar todas las montañas.

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Vale la pena mencionar que uno de esos picos mide 1630 metros. Y Maebh se disfrutó cada metro escalado.

“Maebh ha estado haciendo caminatas desde que podía andar”, comenta Siobhan.

No fue nada difícil para la niña lograr el cometido pues caminar para ella es de lo más divertido que puede hacer, se lo recomienda a todos los niños.

Por su parte la madre disfruta pasar esos momentos en la naturaleza con su hija. Y agradece muchísimo que ella también los disfrute.

“Tuve un sueño cuando estaba en mi barriga, íbamos a hacer caminatas juntas cuando fuese lo suficientemente grande”, dice Siobhan.

Al parecer no se equivocó, pues Maebh en todo momento prefiere salir a caminar con su madre que ver la televisión, el sueño de la madre ahora es el sueño de la hija y esto pone a Siobhan muy feliz.

Cada vez que escalan se les ve muy contentas en las fotografías, disfrutando del paisaje y del ejercicio.

Que sirva de aprendizaje para muchas madres, que poco a poco y con mucho cariño pueden ir enseñando a sus hijos a disfrutar más de la naturaleza y Siobhan añade que no es solo escalar sino inventar todo tipo de actividades al aire libre, permitiendo que los niños se conecten con estos espacios desde el amor y la alegría.

Comparte esta increíble historia con tus amigos y familiares para que se animen a escalar montañas y disfrutar el aire libre, si esta pequeñita pudo hacerlo también nosotros.

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